jueves, 24 de junio de 2010

UNA OPORTUNIDAD PARA LA PAZ

El otro día colgué un post que se titulaba: PSE-EE: Poli bueno, poli malo.
En él quería exponer una actuación que ha sido habitual en el PSE es decir, que con toda cordialidad entre sí, nos han mostrado dos sectores. Así ocurrió, por ejemplo, en el caso Egunkaria, donde la manifestación de apoyo de Donosti no tenía el apoyo del PSE aunque la entonces parlamentaria socialista Gemma Zabaleta y los concejales de este partido en la capital donostiarra Ramón Etxezarreta y Ernesto Gasco participaron en la misma "a título personal".
A mi me cuesta imaginar que una persona de la relevancia de Jesús Eguiguren se haya lanzado a hacer públicas unas reflexiones, de un tema tan sensible como la conveniencia de la legalización de Batasuna, sin que ningún otro responsable tuviera conocimiento. Y sin embargo, las reacciones daban a entender que las cosas habían sido así. Salieron al paso desde el Gobierno de Madrid y desde el Gobierno Vasco para descalificar lo solicitado por Jesús Eguiguren. La pregunta es, ¿dónde tiene los apoyos?
Y siendo todo esto cierto, desde aquí quiero reconocer que sus palabras son una ventana abierta a la esperanza, por un lado, y por otro, tiene visos de tener una parte importante de realidad. Jesús Eguiguren, es un histórico de las relaciones y negaciones con Batasuna, ETA, y la Izquierda Abertzale. No es el típico político de pose ante los medios, no se mueve para salir en la foto. El conoce perfectamente el momento de su partido, tanto en Madrid como en Gasteiz y cómo se siente el bufido del PP en el cogote.
Con todo esto él se arriesga y es un riesgo, no se si alto, pero sí complicado. Sin embargo, lo publicado ayer por Gara, que afirmaba que el documento Reflexiones y propuestas para un futuro de paz y convivencia de Eguiguren ya está redactado "contando con información fidedigna de la voluntad definitiva de la izquierda abertzale de trabajar exclusivamente por vías pacíficas, políticas y democráticas", es un importante aval.
Como muchos de mis conciudadanos y conciudadanas quiero creer que se vislumbra un nuevo camino, una nueva senda para la paz. Ahora a Eguiguren le toca bailar con los increyentes de dentro y fuera de su partido, con la propia Izquierda Abertzale, para que no le deje en la estacada y por supuesto con una pieza importante que aún falta: que ETA se pronuncie de forma clara y nítida, sin dejar espacio a elucubraciones. Si ETA acepta lo que las bases de la izquierda abertzale han decidido, deberán anunciar sin demora su renuncia definitiva, y sin vuelta atrás, a la lucha armada.

No hay comentarios: