Cuando una se pone a pensar las cosas no cuadran, bueno cuadrar sí que cuadran, pero lo que no cuadra es cómo un Gobierno puede tener la cara dura de decir a una la ciudadanía que hay que apretarse el cinturón, a los funcionarios que van a tener recorte -cuando ya había un acuerdo firmado en septiembre suficientemente austero-, a los pensionistas que no van a tener la subida del IPC, que la ayuda a la dependencia se va a freír espárragos, …etc. cuando ese mismo Gobierno ha entregado para el rescate de los bancos, que habían hecho una gestión deleznable, durante el 2008 y 2009, 60.000 millones de euros sin que los banqueros dieran ninguna contrapartida. Banqueros que además han seguido teniendo beneficios, menores claro, pero hablamos de miles de millones de euros en beneficios que los hacen públicos sin sonrojarse.
Y lo que yo digo, porque esos 19.000 millones de euros, que con las medidas previstas quiere ahorrar Zapatero, no se lo dan los bancos. Sería justo que fueran devolviendo el dinero como el resto de mortales, o ¿es que cuando te lo dan ellos, te lo dan gratis?
¿Y de la fiscalidad, qué me dicen ustedes? Llevan días amagando y diciendo que prevén incorporar medidas fiscales para que el que más tenga más pague. No se lo han pensado tanto con los trabajadores, pero no sé porque tengo la sensación de que para cuando pongan en funcionamiento esas medidas – si las ponen-, más de un capital ha salido de nuestras fronteras. ¿Les están dando tiempo para poner sus capitales a buen recaudo?

Yo sé, que la gente, en la calle, sigue teniendo miedo a la izquierda, a la verdadera. Hay quién une izquierda con imágenes estereotipadas, de diablos con cuernos y rabo, de gente que lo arrasa todo,…la derecha se ha encargado muy bien de que esa imagen cale, porque es a esa izquierda social, progresista, a la que temen de verdad. ¿Cómo van a temer al PSOE, al que consideran su alternancia en el Gobierno, no su alternativa? Ese reparto de “Gobierno de unos años tú, unos años yo”, lo tienen ambos completamente asumido como lo normal. Lo que no tienen asumido es que la ciudadanía rompa su esquema. ¿Qué más hará falta para qué nos unamos y rompamos ese esquema perverso de que nos gobierne una u otra cara de la misma moneda? o ¿estamos, irremediablemente, condenados a sobrevivir-cómo podamos- en un callejón sin salida?
No hay comentarios:
Publicar un comentario